Una genialidad de Iñaki Eguileor y Rafael Silveira le otorga un empate a los rojiblancos en un partido en el que no generaron muchas ocasiones de gol

 

os tiros a puerta, un gol, un punto. El Zamora CF sacó mucho rédito de su mejor ocasión y apretó en los minutos finales a un Atlético Astorga que daba señales de cansancio y que se juntó cerca de su portería para salvar un empate que durante muchos minutos parecía un botín escaso para el cuadro maragato.

Y es que los visitantes comenzaron mejor, como si el frío reinante en una tarde de noviembre en el Ruta de la Plata hubiera dejado al cuadro de Miguel Losada paralizado. Sufrieron en el inicio por varios desajustes y, sin que hubiera habido peligro real de comenzar cayendo, en el minuto siete se vieron por debajo en el electrónico.

En un saque de esquina que no llevaba mucho peligro, un mal despeje de la zaga rojiblanca convirtió un balón raso al corazón del área en un balón muerto a escasos metros de la portería de Berlana. Allí estaba Villa para engancharla y poner por delante a los maragatos en un Ruta de la Plata que comenzó frío y ahí se quedó helado.

El Zamora, frustrado. Primero, porque la presión no conseguía su función y los rojiblancos corrían detrás del balón. Después, porque el colegiado dejó actuar con excesiva dureza a los verdes en un par de ocasiones que bien habían podido ser amarilla. Por último, porque en la ofensiva, los zamoranos no enlazaban tres pases seguidos y Dani Hernández se desesperaba tras dos pérdidas consecutivas. Y en estas, apareció el sonido de viento en el Ruta de la Plata, los primeros silbidos de una grada que no encontraba reacción.

El Atlético Astorga contemporizó tras el gol, se hizo con la bola, no arriesgó en exceso e incluso tuvo algún acercamiento a la portería de Juan Berlana. Estaban cómodos los maragatos viendo como el Zamora se resquebrajaba cuando intentaba morder algo más arriba, dejando espacios entre líneas que aprovechaban los verdes. Decidió entonces Losada que había que ser un equipo solidario, juntando a todos sus hombres y cerrando las vías de escape que habían mostrado.

Bajó un poco el Atlético Astorga, bien porque se tomaron un respiro o porque los rojiblancos se asentaron más y apretaron mucho mejor y eso permitió que en una jugada personal de Iñaki acabara llegando el empate.

Cogió Eguileor el balón en la banda y emuló a Zidane y su mágica ruleta para irse de dos contrarios, encarar la frontal del área y ahí dar el toque definitivo para que Rafa Silveira ejerciera de nueve y picara el balón por encima de la salida de Samuel.

La respuesta de los leoneses fue un trallazo desde la frontal de Gonzalo que se estrelló en la cruceta pese al vuelo de Berlana. Volvían a apretar los maragatos y ganaban metros mientras el Zamora se intentaba juntar de nuevo, ganando consistencia.

Empezó a verse fútbol en ambas áreas con una falta del Zamora que se estrelló en la barrera y un cabezazo de Gerard que detuvo Berlana. Tuvo otra contra interesante el cuadro de Diego Merino en una jugada en la que Roberto Levas se lesionó y tuvo que vendarse la rodilla. El lateral pudo volver al terreno de juego tras un largo parón por sus molestias, lo que no permitió ver más fútbol en la primera mitad.

En el segundo tiempo salió con mas brío el club rojiblanco aunque, con el paso de los minutos volvió a adueñarse del balón el Atlético Astorga. Pasada la hora de juego, los visitantes gozaron de una buena ocasión en las botas de Gerard pero no pudo ver puerta ante la salida de Berlana.

Cesar Simón, el más incisivo en el segundo tiempo, consiguió ganar la espalda de la defensa y a punto estuvo de poner por delante a los suyos pero Samuel rozó el balón para enviarlo a córner. El Zamora parecía llegar al tramo final del partido más entero y embotellaba al Atlético Astorga.

Apretó y mucho el Zamora y abrió el campo con la entrada de Dani Peralta para actuar de puñal en la banda contraria a Dani Hernández y eso permitió que los laterales rojiblancos también llegaran con peligro. Estuvo bien el juvenil, dándole otro aire a los rojiblancos.

Pese a que el Astorga firmaba el empate, los rojiblancos no tenían tampoco muchas fuerzas más para acabar perforando la portería de Samuel.

Quizá, en otros tiempos, el Ruta de la Plata hubiera puesto ese «poco» que le faltó a los rojiblancos en el tramo final para que llegara la victoria. Sin embargo, como ya ha ocurrido en otros encuentros de esta temporada, el Zamora volvió a firmar tablas, lo que le deja un punto más lejos de los puestos de «play off» y convierte el partido en Bembibre en la enésima final de los de Losada, obligados a sumar los tres puntos si no quieren despertar del sueño de disputar la fase de ascenso antes de que finalice el año.

Con el tiempo cumplido, el aficionado tuvo que vivir el último susto con una falta que sacó Roberto Puente y que se estrelló en la barrera, poniendo fin al encuentro en el Ruta.