El Zamora Club de Fútbol conseguía este fin de semana la sexta victoria consecutiva en las seis primeras jornadas del campeonato en un duelo más duro, exigente y complicado de lo que reflejó el marcador final de 0-3 para los pupilos de David Movilla.

Era un duelo entre dos conjuntos de la zona alta y el Ourense mostró el porqué de su buena clasificación con un primer acto de mucho nivel. Si bien es cierto que Fermín Sobrón no tuvo que hacer ninguna intervención importante, el Ourense generó mucha incertidumbre a la retaguardia del Zamora y creó varias llegadas de peligro. Los minutos pasaban y al equipo rojiblanco le costaba tener el balón y alcanzar el área rival para incomodar al conjunto local. Fue a raíz del ‘tiempo muerto’, para beber agua ante la elevada temperatura que había, cuando el duelo empezó a equilibrarse.

Y entonces, en el tramo final de la primera parte llegaron las acciones que decantaron el duelo. A falta de cinco minutos para el descanso, un remate de cabeza de Jesús Muñoz a la salida de un córner se colaba en la portería local, pero Prado, central del Ourense, lo evitaba con la mano. Penalti y expulsión. Etxaburu convertía la pena máxima para avanzar al Zamora. Y ya en el descuento de esa primera parte, una buena acción combinativa del Zamora finalizó con un control y un remate soberbio de Luis Rivas, que convertía su primer gol como profesional en el club rojiblanco y colocaba el 0-2 para los de David Movilla.

El Ourense no se rindió y pese a la inferioridad numérica salió tras el descanso con mucho ímpetu y generó de nuevo varias llegadas a la portería de Sobrón. Esta vez el arquero sí tuvo algunas intervenciones de mérito para evitar que los gallegos recortasen distancias. David Movilla tuvo que variar su estructura sobre la marcha tras la buena puesta en escena del Ourense y logró el objetivo de suturar algunas brechas que se habían generado en ese trabajo defensivo. Cuando el partido caminaba por la media hora de juego de la segunda parte llegaba la sentencia del Zamora. Jugada individual de Joel Priego que el propio atacante finalizaba con un latigazo al palo largo, inalcanzable para Marqueta.

Hasta el final, el Ourense dispuso de un mano a mano que detuvo bien Fermín Sobrón y el Zamora pudo hacer el cuarto, pero Morales se encontró con Marqueta en un uno contra uno y Baldrich vio como un defensor taponaba su disparo que llevaba marchamo de gol. Al final, victoria por 0-3 para un Zamora que suma 18 puntos de 18 posibles y que está pendiente de Luis Rivas y Luismi Luengo, que tuvieron que retirarse del partido antes de tiempo por problemas respiratorios.