El Zamora CF sumó un punto en su visita al campo municipal de Espiñedo tras empatar 1-1 frente al Arenteiro, en un encuentro marcado por las condiciones climatológicas adversas y por un juego directo condicionado por el estado del terreno.

Cuéllar adelantó a los locales en la primera parte, mientras que Bolo igualó la contienda en la segunda mitad, en un choque en el que el conjunto gallego terminó con un jugador menos por la expulsión de Jordan. Con este empate, el equipo rojiblanco ve cómo se complica su lucha por acceder al play-off de ascenso.

El técnico del Zamora, Juan Sabas, mantuvo su habitual esquema táctico y repitió el mismo once que había alineado en la anterior jornada ante el Celta Fortuna. Fermín Sobrón fue titular en portería; Campabadal y Sergio Nieto ocuparon los laterales, con Bolo y José Carlos en el eje de la zaga. En el centro del campo formaron Clavería y Carlos Ramos, mientras que Rufo y Tresaco actuaron por bandas, Kike Márquez ocupó la mediapunta y Pito Camacho fue la referencia ofensiva.

El arranque del partido estuvo condicionado por la intensa lluvia que cayó sobre Espiñedo durante la primera media hora, dificultando la circulación del balón y obligando a ambos equipos a optar por un juego más vertical y menos elaborado.

El Zamora arrancó con buen pie y generó peligro desde el primer minuto, con un potente disparo lejano de Sergio Nieto que obligó al guardameta local, Diego García, a realizar una intervención de mérito. Los visitantes parecieron adaptarse mejor a las condiciones del campo y rondaron de nuevo el gol en el 12’, en una acción en la que Rufo estuvo cerca de llegar a un balón en profundidad.

Sin embargo, el Arenteiro también avisó con un disparo de Cuéllar que se estrelló en el larguero en el minuto 14. En esa misma jugada, Fermín Sobrón sufrió un golpe y tuvo que ser atendido, aunque finalmente pudo continuar bajo los palos. Superado el ecuador del primer tiempo, Tresaco rozó el gol con un disparo ajustado que se marchó rozando el palo.

El tanto local llegó en el minuto 35, cuando Pascu desbordó por la derecha y sirvió un pase raso al área pequeña que Cuéllar empujó a la red. El Zamora acusó el golpe y no logró reaccionar con claridad antes del descanso. De hecho, fue el conjunto gallego quien estuvo más cerca de ampliar su ventaja, en una acción individual de Ferreiro que Clavería desvió a córner de forma providencial.

En la segunda mitad, el Zamora mostró una versión más decidida. A los pocos minutos se reclamó un posible penalti sobre Tresaco que el colegiado no consideró punible. El extremo volvió a generar peligro poco después con un centro al segundo palo que Rufo no logró rematar entre los tres palos.

Sabas buscó soluciones desde el banquillo y dio entrada a Roni, quien dispuso de una ocasión clara tras ganar en velocidad a Diori, pero se topó con Diego García. El premio al empuje visitante llegó en el minuto 71, en una jugada por la izquierda en la que Tresaco colgó un centro que José Carlos peinó y Bolo, bien situado, cabeceó al fondo de la portería.

La recta final del partido estuvo marcada por la expulsión de Jordan en las filas del Arenteiro, que jugó los últimos minutos con un hombre menos. A pesar de ello, el marcador no volvió a moverse.

El punto sumado deja un sabor agridulce en el Zamora CF, que ve cómo se esfuma una nueva oportunidad de acercarse a los puestos de privilegio cuando restan pocas jornadas para el final del campeonato.