‏Nosotros siempre creímos.
Luchamos.                                                                 Lo intentamos hasta el final.
Nunca perdimos la esperanza, ni la ilusión.          Si caíamos, nos levantábamos.

Y así, hemos llegado hasta aquí. Un playoff que es mucho más que eso, la compensación a una temporada sufrida, donde el esfuerzo y las ganas nunca faltaron. El gol de Charly daba la victoria frente al Cristo Atlético, en un partido frenético e importantísimo.

El Palencia no lo puso fácil, y a los pocos minutos avisaba con un tiro que se encontraba con el larguero. Poco a poco el Zamora CF se iba haciendo con el partido, con posesiones más largas y generando peligro. La primera ocasión llegaba tras una buena jugada al contraataque en la que Sancho la ponía para que Ámez le pegara, pero se iba demasiado alta.

Con el dominio del partido y los acercamientos al área, crecía el nerviosismo de un Cristo Atlético que se quedaba con diez tras la expulsión de Israel por doble amarilla. Con superioridad en el campo, lo seguían intentando los rojiblancos, y así Luis Rivas hacia un buen tiro en el 33, pero demasiado escorado, encontrándose con la red.

Tras el descanso, salía con fuerza el Zamora, sabedor de que el gol era el único camino para entrar en el playoff, y no tardaba en encontrarlo. Charly remataba en el área pequeña un buen centro desde la izquierda y mandaba el balón al fondo de la portería. Se desataba la locura en el Ruta de la Plata, si no cambiaban los resultados de los otros partidos, el equipo jugaría la fase de ascenso.

A punto estuvo Sancho de poder hacer el segundo con un tiro raso y cruzado que se fue fuera por muy poco. Mientras Yago Iglesias movía el banquillo. Dando entrada primero a Silva por Galas, luego a Manu Viana por Luís Rivas, titular por primera vez con el primer equipo. Y más tarde a Vallejo y ÁLex Ares por Dani Hernández y Theo.

Con sangre nueva en el césped y energías renovadas, seguían llegando las ocasiones. ÁLex Ares filtraba un buen balón a Sancho pero conseguía sacarla la defensa rival y Tibu conectaba con Charly para buscar un buen tiro pero la atajaba el portero. Y así con los nervios a flor de piel, el arbitro pitaba el final y el Zamora conseguía meterse en el top 5 para jugar el tan ansiado playoff de ascenso a primera RFEF.

Unidos en las buenas y en las malas, luchando juntos contra todo, esforzándose hasta el final.

Rendirse nunca fue una opción.

¡Vamos mi Zamora!