Vertiginosa tarde la que se ha vivido este sábado en el estadio Nueva Balastera de Palencia. El encuentro entre el Zamora CF y el Numancia B prometía dejar grandes momentos, y así ha sido, sobre todo para los rojiblancos que se han impuesto en el marcador con 2-1 que les ha sabido a gloria.
Tras el minuto de silencio por las víctimas del Covid 19, el partido arrancaba con un Zamora dispuesto a darlo todo en esta semifinal del Play Off de ascenso a Segunda B. Con un once formado por Villanueva, Parra, Coque, Raúl Álvarez, Piña, Juanan, Garban, Vallejo, Rubiato, Carlos Ramos y Escudero, los de Movilla iniciaron el encuentro con ganas de ‘comerse’ a su rival.
Pese a la falta de afición por ser un partido a puerta cerrada, la emoción se palpaba en el ambiente, y es que ante un graderío vacío se escuchaban todas y cada una de las palabras que se decían sobre el terreno de juego, por lo que no había indicación por parte de los entrenadores o de los jugadores que pasara desapercibida.
Fue tras la primera pausa de hidratación cuando el Numancia B se creció y en el minuto 37 un gol directo de Ekiza entraba en la portería de Villanueva. Pero los de Movilla, lejos de venirse abajo, remontaban enseguida con un tanto de Escudero en el 38. Y cuando todavía estaban saboreando el empate, llegó Carlos Ramos y marcó de nuevo en el minuto 41 tras un pase de Escudero.
Una remontada con la que los del Zamora daban la vuelta por completo al marcador dejando con cara de incredulidad a los numantinos, que se iban al descanso sin haber podido apenas celebrar su único tanto hasta el momento cuando el marcador ya anotaba dos para la plantilla rojiblanca.
Comenzaba así una segunda parte con cambios en el Zamora CF: primero fueron Dani Hernández y Guille Perero, y poco después Sergio García y Valentín los que salían al campo con ganas de dar guerra. Con el buen sabor de boca de la remontada el equipo se crecía, y ya el Numancia B poco pudo hacer antes los de Movilla, que se mostraron claramente superiores y defendieron el resultado hasta el final del partido, que terminó con 2-1 que les daba el pase directo a la final.
Cabe destacar lo mucho que animaron los compañeros y cuerpo técnico desde el ‘banquillo’, situado en las primeras gradas justo detrás de este debido a las medidas sanitarias impuestas por el coronavirus, que no pararon de aplaudir, de jalear y de dar aliento a los que estaban en el campo, lo que ayudó también a que, sobre todo, la recta final se viviera con mayor intensidad.
Y con ese 2-1 el Zamora conseguía su merecido puesto en la final para jugarse el ascenso a Segunda B, que se celebrará el sábado 25 de julio en el mismo escenario y a la misma hora, y en el que tendrá como rival a la Arandina o a la Segoviana.
Ánimo Zamora que vamos a subir a segunda B. Campeones.