El Zamora CF rompió su racha de dos derrotas consecutivas con un sólido triunfo por 0-2 ante el SD Amorebieta. En un partido marcado por momentos de irregularidad, el equipo de Juan Sabas encontró en Rafa Tresaco y Fermín Sobrón a sus hombres más determinantes: el primero, autor de los dos goles; el segundo, clave al detener un penalti que pudo cambiar el rumbo del encuentro.
El choque comenzó con un ritmo alto. En el primer minuto, ambos equipos generaron su primera ocasión de peligro. Primero lo intentó el Zamora con un remate de cabeza de Pito Camacho tras un buen centro de Tresaco, y acto seguido respondió el conjunto local con una acción por banda que no encontró rematador.
Durante los primeros compases se impuso un ida y vuelta constante, hasta que el Zamora CF logró asentarse y controlar el ritmo del partido. A partir de ahí, los rojiblancos comenzaron a acumular llegadas, aunque sin concretar. La primera gran oportunidad llegó tras un centro envenenado de Kike Márquez que, tras desviarse en un defensa, estuvo cerca de sorprender al guardameta local Marino.
El dominio visitante se intensificó con el paso de los minutos. Tresaco y Márquez lo intentaron desde media distancia, y en el minuto 25 se produjo una acción de peligro que acabó en gol, aunque fue anulado por un fuera de juego claro de Pito Camacho tras un saque de esquina en corto ejecutado por Sergio Nieto.
El Amorebieta, hasta entonces contenido, reaccionó tras esa jugada. Vicandi dispuso de una clara ocasión en una acción al espacio que obligó a Carlos Gutiérrez a frenarlo con una falta que le costó la amonestación y que pudo haber tenido consecuencias mayores. El Zamora, sin embargo, no perdió el orden y antes del descanso volvió a generar peligro con una doble ocasión de Márquez y Sergio Nieto.
Cuando parecía que el empate sin goles sería el resultado al descanso, apareció la figura de Rafa Tresaco. En el minuto 43, tras una recuperación de Campabadal en campo propio, Kike Márquez filtró un excelente pase en profundidad que el extremo transformó en el 0-1 con un disparo cruzado.
Tras el paso por vestuarios, el conjunto rojiblanco salió con la consigna de mantener su ventaja, aunque se vio superado durante los primeros minutos por un Amorebieta más agresivo. Fruto de ese empuje llegó la ocasión más clara de los locales: un penalti cometido por Carlos Gutiérrez, que se resbaló dentro del área y arrolló a Ben Hamed. Hervías fue el encargado de lanzar, pero su disparo fue detenido por un excelente Fermín, que adivinó la trayectoria y mantuvo con vida a los suyos.
La intervención del portero fue un punto de inflexión. El Zamora recuperó el control del juego y, poco después, logró el tanto de la sentencia. En el minuto 66, un balón largo desde la portería fue mal gestionado por la zaga local. El resbalón de un defensor permitió a Tresaco quedarse solo ante Marino, al que superó tras una precisa conducción y definición para firmar el 0-2.
A partir de ahí, el Zamora CF gestionó con inteligencia la ventaja. Sabas introdujo cambios para reforzar el centro del campo y el equipo se replegó, minimizando riesgos. Apenas sufrió en defensa, y las intervenciones de Fermín, especialmente un despeje de puños en el descuento ante un disparo potente de Ben Hamed, sellaron un triunfo trabajado y necesario.
Con esta victoria, el Zamora CF se mantiene firme en la lucha por el playoff de ascenso y da un paso importante para alejarse de la zona baja. A falta de pocas jornadas para el final de la liga, el equipo recupera sensaciones y alimenta su ambición en un tramo decisivo del campeonato.