David Movilla valoraba qué Burgos CF se espera en el partido del próximo domingo: “Es un equipo que alterna en cuanto a nivel táctico, de estructuras… Estamos preparados para las variantes que ellos pretendan. No obstante ellos también entiendo que tienen la capacidad para jugar de una manera u otra, seguro que han tomado buena nota del partido de ida, nosotros también. Yo creo que el Burgos lo que tiene es una gran solidez defensiva, son ganadores de duelos y luego tienen una extraordinaria calidad en sus futbolistas. Están haciendo una temporada inmaculada, tienen ya el primer puesto asegurado a falta de tres jornadas y creo que se va a ver un gran Burgos porque juegan con su gente, un público que aprieta mucho y que allí no va a ser diferente, y lo que vamos a tratar es de que se vea un buen Zamora también porque habiendo hecho un buen partido en la ida, no fue suficiente para llevarnos los tres puntos”.

Sobre si influirá el número de bajas en el partido que el míster tiene previsto: “Creo que las ausencias condicionan pero no determinan. Mientras que tengamos once para salir, este equipo tiene un gran espíritu, y se va a mostrar competente y competitivo”. Y añade: “Con esos condicionantes vamos a tratar de conectarnos con lo que sí podemos que es vibrar alto, tener un nivel de energía y de entusiasmo adecuado, y estar conectados con lo mejor de este equipo que reside en la fuerza del colectivo, y con eso vamos a tratar de dar la cara como venimos haciendo estas últimas semanas”.

El objetivo de esta temporada ya está cumplido, pero el sueño de ese ascenso a Segunda A sigue ahí, algo sobre lo que el técnico del Zamora señala: “Nosotros más que soñar con lo que se pueda lograr, lo que pretendemos es poder conectarnos con cómo queremos sentirnos, qué comportamientos queremos honrar, qué valores tenemos que honrar para sentirnos orgullosos de nosotros mismos. Nuestro fin no es ganar, la consecuencia puede ser lograr ciertos hitos que este equipo va logrando, pero el objetivo no ese. Nuestro motor es conectarnos con lo mejor de nosotros mismos y llegar al vestuario todas las semanas orgullosos de lo que el equipo muestra”.

De cara a que si el Burgos consigue su clasificación matemática pueda desvirtuarse la competición porque el equipo se relaje en las dos última jornadas, Movilla opina: “No estoy en la mente ni en la cabeza de lo que sienten, lo que sí es cierto es que el liderato si no es matemático ya es virtual. Que el Burgos va a quedar campeón de este grupo no tiene nadie duda, ni siquiera ellos, yo creo. Si eso se diera yo creo que se va a dar en los tres partidos contra los tres rivales. Pero estoy convencido, conozco al entrenador y la trayectoria de varios futbolistas de la plantilla, y si algo tienen es un gen competitivo que es lo que les ha dado estar a ese nivel de rendimiento, y llevan cuarenta y tantos puntos a falta de tres jornadas por lo tanto tengo muy pocas dudas de lo que el Burgos va a mostrar”.

Cómo puede afectar el que en El Plantío solo haya afición del Burgos al equipo rojiblanco, Movilla considera: “No soy adivino, pero si cogemos como referencia el partido en El Helmántico, estando muy arropados por nuestra gente que fue con muchas ganas de empujar y de jugar el partido, pues los 2500 o 3000 del Salamanca crearon un clima importante a favor del equipo local, y en esa referencia la realidad es que no dimos nuestra mejor versión. Aquel día, el potencial del Salamanca unido al clima que generaron, fue superior al que nosotros fuimos capaces de dar. Pero el pasado no determina nuestro futuro, y ahí debemos extraer las conclusiones adecuados en base a la experiencia vivida. Lo que tengo claro es que el ambiente que se viva en El Plantío va a ser similar al que vivimos en Salamanca, pero a mí me encanta porque son ambientes de fútbol que estamos deseosos de volver a ver en todos los campos, que con las restricciones hay en muchos en los que no es posible. Aunque el público local apriete, que lo entiendo, lo veo como un reto extraordinario más para sacar lo mejor de nosotros en ese ambiente”.

Las bajas son otro de los temas que el entrenador del Zamora ha tratado: “Tenemos nueve bajas fijas y dos o tres que son duda a día de hoy. Esta semana convocaremos a algún jugador del Juvenil, en base a las necesidades que identifiquemos de cara al partido y sobre todo en los casos como los de Hache, Dani y Nico. En el caso de la baja de Mapisa, viene Lucas como portero”.