El Zamora CF protagonizó una actuación sobresaliente en el estadio Ruta de la Plata durante el partido de la segunda ronda de la Copa del Rey frente al CD Tenerife. Sin embargo, a pesar de ser el claro dominador del encuentro y de generar numerosas oportunidades, los rojiblancos no lograron reflejar su superioridad en el marcador. La tanda de penales terminó inclinando la balanza a favor del conjunto tinerfeño, que avanzó a la siguiente fase tras los fallos de los zamoranos desde los once metros.

Con la titularidad de Altube en la portería y la presencia del croata Karlo como delantero centro, Juan Sabas presentó un once competitivo, preparado para plantar cara a un rival de superior categoría. Desde el inicio, el Zamora impuso su ritmo, tomando el control del balón y generando peligro en el área visitante.

El Tenerife, por su parte, mostró su intención de aprovechar el contraataque, amenazando con rápidas transiciones. En el minuto 19, una internada de Cantero y un remate de Yanis obligaron a José Carlos a intervenir con precisión para evitar el tanto visitante. A pesar de esta acción aislada, el equipo canario no logró desbordar la sólida defensa zamorana.

El equipo local continuó acumulando méritos para abrir el marcador, con Kike Márquez y Carlos Ramos creando peligro en jugadas a balón parado. Poco antes del descanso, el croata Karlo generó una oportunidad clara al asistir a Mancebo, quien, con la portería a su favor, envió el balón al larguero. A pesar del esfuerzo, el 0-0 se mantuvo al término de los primeros 45 minutos.

En la segunda mitad, el Zamora mantuvo su determinación. Campabadal, incorporado desde el banquillo, rozó el gol con un disparo desde la frontal que pasó cerca del poste. Mientras tanto, el Tenerife, liderado por Pepe Mel, intentaba ganar profundidad mediante cambios estratégicos, pero su juego carecía de contundencia en ataque.

La recta final del partido fue un despliegue de insistencia por parte del Zamora. Tresaco, Márquez y Roni tuvieron en sus botas la posibilidad de anotar, pero la fortuna seguía esquiva. El Tenerife, por su parte, terminó con diez jugadores tras la expulsión de Gayá en la prórroga, aunque logró resistir gracias a su disciplina defensiva.

En los tiempos extra, el Zamora continuó empujando. La falta de acierto condenó a los rojiblancos a la lotería de los penaltis.

En la tanda, los zamoranos fallaron tres lanzamientos, mientras que el Tenerife mostró mayor eficacia, sellando su pase a la tercera ronda. A pesar del resultado adverso, el Zamora CF dejó una imagen impecable, ganándose el reconocimiento de su afición por su entrega y superioridad futbolística durante gran parte del encuentro.